Por: Dra. Sara Purca Cuicapusa, Instituto del Mar del Perú- IMARPE, Perú| Enero, 2022
En el mundo, los plásticos están presentes como objetos usados en todas las actividades humanas, como, por ejemplo: utensilios descartables para comida rápida, para hospitales, ropa para protección médica, cajas para almacenar alimentos domésticos y especializados, aislamiento, elementos de salubridad, prótesis, vestimenta, calzado, equipos informáticos, construcción, entre otros.
Debido a las diversas aplicaciones, gracias a su amplio espectro de propiedades físicas y químicas, los usamos tanto de manera doméstica como industrial; pero el problema es que, desde su diseño, muchos de estos utensilios plásticos están hechos para convertirse en basura.
¿Hasta dónde hemos avanzado en Perú en la investigación de microplásticos?
En el Perú, el 2007 se estimó que 1.6 millones de toneladas al año se podría convertir en desechos marinos, mientras que en el 2017 se calculó que 522 fragmentos de microplásticos secundarios (partículas de plástico menores a 5 mm provenientes de plásticos más grandes que se han fragmentado) por metro cuadrado pueden ser encontrados en las playas de arena del Callao (Costa Azul, Ventanilla); siendo hasta el momento una de las playas más contaminadas por microplásticos que se ha podido detectar.
Además, en mínimos porcentajes se han encontrado fragmentos azules de plásticos en peces pequeños costeros pelágicos, así como en la caballa; mientras que microplásticos de color azul, negro y fucsia fueron los colores dominantes en las branquias de peces de zonas rocosas y costeras de importancia económica.
¿Cuáles son las iniciativas o proyectos se han realizado o ha participado el IMARPE? ¿Qué resultados se han obtenido?
Se está participando en el proyecto titulado “Reduciendo los impactos de los desechos plásticos en el Océano Pacífico Oriental (Ecuador-Perú-Chile)”. La idea principal del proyecto es establecer un enfoque multidisciplinario y multi-institucional (especialistas en ecotoxicología, ecología, industrias, conservación, ingeniería sustentable, ciencias sociales), con seis universidades de Reino Unido, Ecuador, Perú y Chile; con la visión de reducir los vertimientos de plástico en el Pacífico Oriental y de hacer intervenciones en áreas clave para apoyar el desarrollo más sustentable del flujo circular de los plásticos.
El proyecto esta divido en tres temas:
1: Fuentes y conductores: Establecer las fuentes y las rutas de la contaminación por plásticos en el Pacífico Oriental, desde Ecuador, Perú y Chile; haciendo un mapeo regional de los flujos de basura y los ciclos de vida, medidos desde las industrias clave en combinación con las mediciones regionales de contaminación por plásticos.
2: Impactos de la contaminación por plástico: Identificar los impactos, socioeconómicos, ecológicos y de salud y bienestar en las pesquerías y el turismo.
3: Intervención, mitigación y adaptación: Codiseñar estrategias de intervención, mitigación y adaptación para reducir el flujo e impacto de la contaminación del mar por plásticos en el Pacífico Oriental.
IMARPE tendría acción en el tema 2, que tiene como meta “Entender los impactos de los microplásticos en especies y productos pesqueros comerciales”, co-liderado por Sara Purca (IMARPE, Perú) y Pennelope Lindeque (PML, UK). Como actividades se ha planificado analizar 20 especies comerciales, tanto en Ecuador (4 sitios) y Perú (4 sitios) para determinar microplásticos en el cuerpo de especies de importancia comercial que podría tener riesgo para el consumo humano, y los prevalecientes en productos pesqueros comerciales, harina, aceite, congelados, biodiesel, y agar.
Las investigaciones que se han realizado en los manglares de Tumbes, con la participación del Laboratorio Costero del IMARPE con sede en Tumbes, identificaron la presencia de microplásticos en los cangrejos del manglar. Se encontró que las branquias son la principal ruta de entrada del microplástico en el cangrejo, siendo los más comunes las fibras y los films, en tanto que los tamaños más grandes fueron identificados mayormente en el tracto digestivo del referido recurso pesquero.
Esta iniciativa se articula con la Red REMARCO y el proyecto RLA7025, no solo en la parte de investigación sino también a través de la estandarización de la metodología de análisis de micro plásticos para sedimentos; respecto a lo cual se tiene previsto entrenar a los investigadores del Laboratorio Costero de Tumbes, así como a colegas de la Universidad Nacional de Tumbes, y una tesista de la Universidad Científica del Sur. De esta manera, tendremos un grupo de expertos en estas técnicas, quienes podrían contribuir con su experiencia al proyecto RLA7025 y a REMARCO.
Como avance, IMARPE realizó un muestreo en la playa de arena Costa Azul-Ventanilla, el 10 de diciembre de 2020, cumpliendo los protocolos de seguridad por la emergencia sanitaria, encontrándose 82.66 items/m2, y más de 500 ítems/m2 de microplásticos. Dichas muestras todavía están en proceso de verificación, ya que la pandemia ha generado algunos retrasos en el trabajo de laboratorio.
En cuanto a los avances que se tienen con REMARCO para el muestreo de sedimento, con el objetivo de realizar los estudios de microplásticos en la bahía de Callao, el 15 de diciembre del 2020 se realizó un muestreo exploratorio frente a Callao, para obtener un testigo de sedimento y muestras superficiales de agua de mar para estudios de microplásticos.
La zona en donde se llevó a cabo tiene una profundidad aproximada de 10 m. La obtención del testigo de sedimento se realizó mediante buceo utilizando un saca testigos, llevándose luego al laboratorio de geología marina de la sede central de Imarpe para su análisis correspondiente.
El lugar se caracterizó por presentar un ambiente reducido con olor intenso a sulfuro de hidrógeno, con un sustrato bastante fangoso y floculento. El muestreo superficial se realizó con una red tipo manta, de tipo arrastre.
En junio del 2021 se realizó el muestreo exploratorio de sedimentos marinos a bordo del Buque de Investigación Científica “Luis Flores Portugal”. Para obtener el testigo se utilizó un multisacatestigos (MUC) con el que se obtuvo uno de aproximadamente 35 cm de longitud, el cual fue submuestreado a bordo de la embarcación y conservado para su posterior análisis en el laboratorio. Asimismo, se midieron parámetros físicos, químicos y biológicos de la zona de estudio; lo cual va a servir para identificar el lugar más apropiado, para posteriormente realizar los estudios sistemáticos y más detallados con respecto a la contaminación por microplásticos.
Cabe resaltar que la bahía del Callao es una zona muy impactada por actividades antropogénicas y naturales, así como procesos biogeoquímicos costeros.
Finalmente, para el caso de Perú, es importante conocer el porcentaje de acumulación de microplásticos en los sedimentos y la columna de agua, a fin de profundizar con nuevos estudios en los impactos que estos generan. Esta información es indispensable, para conocer las futuras implicancias de sus efectos en el mar dentro de la cadena trófica, y eventualmente en la seguridad alimentaria y la salud.
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